El grupo de bordadoras se forma en 1974 con apoderadas del Jardín Manderscheid, quienes debido a las necesidades que tenían crearon esta agrupación para llevar el sustento de sus hogares. 

Con agujas de lanas y bolsas de harina plasman la vida cotidiana de campo que vivía cada familia. 

Algunos de sus trabajos en lana sobre arpillera fueron utilizados en el mural de respaldo durante la misa que tuvo el papa Juan Pablo II, en su visita a Concepción, en el año 1987. 

Durante el año 2004 recibieron el premio de Lorenzo Berg a los artesanos más destacados en el país. 

Y ya en el año 2010 la UNESCO les entrego el Sello en Excelencia de Artesanía. 

Hoy en día sigue siendo liderada por su fundadora Rosmarie Prim Becker, llevando más de 50 años de trayectoria, con una cuarta generación de Bordadoras siguen vigentes en la historia de la Artesanía.